lunes, 8 de octubre de 2018

#LA LIBERTAD Y EL DESCANSO VERDADERO EN CRISTO


Texto Central:
Evangelio según San Mateo cap.11 vers. 25-30

Introducción
Jesús se encuentra enseñando en las ciudades donde habitaba Juan el bautista y a sus seguidores comenzó a exhortar. Luego vuelve a las ciudades donde había hecho muchos milagros, sin embargo no se habían arrepentido. Las escrituras definen a estas ciudades como impenitentes, un ejemplo actual de impenitencia es una ciudad o en nuestro caso una congregación que se mantiene firme en su comportamiento, actitud o ideas, a pesar de castigos, advertencias o consejos.
Cristo declara Juicio en los versículos del 20 al 24, sin embargo del 25 en adelante comienza a demostrar una vez más un acto de gracia. 
Cristo es la fuente de revelación y alaba al Padre por ello. Demuestra su unidad como parte de la trinidad en los versículos 25, 26 y 27.
Cristo  es coeterno con Dios el padre y las escrituras respaldan que toda autoridad le es dada en la tierra para nuestro favor, demostrando misericordia a través de ello. Mateo 28:18 nos dice: Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
Juan 3:35 “El Padre ama al Hijo, y todas las cosas ha entregado en su mano.”
Juan 13:3: “ sabiendo Jesús que el Padre le había dado todas las cosas en las manos, y que había  salido de Dios, y a Dios iba,”
Juan 17:2: “como le has dado potestad sobre toda carne, para que dé vida eterna a todos los que le diste.”

Desarrollo
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    Nuestro Señor nos muestra que la gloria esta en él, que él es la fuente reveladora. En este sentido podemos comparar los primeros versículos con la carta a los corintios en el capítulo 1 versículo 26 en adelante que declara: Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia. La Gloria solo es de Dios.

Ver. 26 así le agrado al Padre. Soberanía, providencia de Dios.

Luego de demostrar su gloria, su deidad, su poder y magnificencia, nos declara humildemente: Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.” ¿A caso, luego de comprender su deidad y su poder no descansaríamos en él? ¿Aún no somos capaces de ver que verdaderamente en Cristo podemos descansar?
Muchos nos preguntamos, ¿descansar de qué? ¿Del trabajo? ¿La rutina? El evangelio de Juan en el capítulo 7 versículo 37 y 38 nos dice: “En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba, El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.” El descanso está directamente relacionado con el descanso del pecado que nos asedia. Del pecado deriva: La Esclavitud, Congoja, Ansiedad, Depresión, Temor, Duda, cansancio, enfermedad, muerte, condenación y ruina; Estos son los efectos del pecado.

El versículo 28 nos dice: Trabajados y cargados. La traducción al lenguaje actual nos dice: “Ustedes viven siempre angustiados y preocupados. Vengan a mí, y yo los haré descansar.” Hay una relación directa en esto respecto al yugo del pecado y la pesada carga del legalismo Judío. Entendamos Legalismo como: Un término que usan los cristianos evangélicos para describir una posición doctrinal enfatizando un sistema de reglas y reglamentos, para alcanzar tanto la salvación como el crecimiento espiritual. Los legalistas creen que es necesaria la estricta adherencia literal a esas reglas y reglamentos. Doctrinalmente, es una posición esencialmente opuesta a la gracia. Aquellos que sostienen una postura legalista, pueden fallar aún en ver el propósito real de la ley, especialmente el propósito de la Ley de Moisés en el Antiguo Testamento, el cual es el ser nuestro “ayo” o “tutor” para traernos a Cristo. Por lo tanto Cristo en este pasaje nos invita libremente a una relación leal, y libre en él.

Realmente conocemos al Dios que nos invita a descansar? Porque ponemos por delante primero nuestras obras, para luego de alguna manera descansar en él?, acaso somos justificados, tomados en cuenta primero por lo que hacemos? O somos tomados en cuenta porque declaramos y confiamos en el Dios que nos invita a descansar?. Jeremías el gran profeta del reino del Sur de Juda (del reino en que descendió genealógicamente Cristo) fue tomado por Dios como profeta y en una de sus profecías en el capitulo 31 versículo 25 las escrituras nos menciona: “Porque satisfaré al alma cansada, y saciaré a toda alma entristecida.”, imagínese usted y cito la definición de Jeremías: Fue de pocos amigos, se le prohibió casarse o tener hijos como señal de que se acercaba el juicio y que la próxima generación sería barrida. Era el más intenso en los mensajes condenatorios para este reino del sur, contrario a las esperanzas del pueblo. Condeno tenazmente al pueblo de Israel por su aversión (rechazo o repugnancia) a la Idolatría, a Jeremías le dolía profundamente el infortunio de su pueblo.

En medio de este caos, en medio de estas claras desobediencias Dios da un pincelazo de gracia que había de venir por medio de Cristo unos 600 años después, declarando: “Porque Yo he de satisfacer al alma cansada y he de saciar[j] a toda alma atribulada.” (Dios habla hoy, traducción.)
En los versículos 29 y 30 evidenciamos Ley y gracia. Llevad el yugo es símbolo de sus mandamientos ya que por causa de ellos conocemos o se hace manifiesto el pecado. Al pecado lo conocemos por medio de ley. Por lo tanto en Cristo encontramos gracia para poder cumplir con la ley y este yugo (pecado o ley) que nos complica muchas veces la existencia con humildad y con paciencia lograremos salir del estado de desesperación por no cumplir con su ley. Tener humildad y paciencia es tener el carácter de Cristo, debemos reconocer que nosotros no podemos, de esta manera lograremos de manera definitiva encontrar el descanso para nuestras almas, lo que Cristo nos impone no es difícil de cumplir por medio de él, tampoco su carga que nos hace llevar será pesada. Una de las obras más famosas como el progreso del peregrino, hacen ver que hasta el día de la redención llevaremos una mochila pesada, una carga continua que permanecerá en este mundo, pero que sin duda por medio de Cristo es posible, por más que empinada o alta sea la cumbre, en Cristo encontramos paz y esperanza para avanzar!!

Conclusiones


Perseveramos porque somos Salvos, y no perseveramos para ser Salvos.
Nosotros evidenciamos buenas obras porque le hemos conocido, no evidenciamos buenas obras para  conocerle y agradarle.

Antes de obedecer debemos dejar nuestras cargas y comprender de manera completa el significado de su muerte y la justicia que nos imputo para ser libes del pecado. Cristo y solo Cristo debe ser predicado y de esta manera establecer la base solida de nuestra perseverancia. 

Mientras no dejemos todo a las plantas de Cristo, seremos sin duda asediados por el pecado, por el enemigo. El yugo de satanás se adherirá a nosotros de manera de permanecer siempre en la misma situación, sin cambios que evidencien frutos dignos de arrepentimiento.
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El yugo de Cristo nos libera y nos hace descansar puesto que es ligero, por lo tanto si el camino se te ha hecho pesado, te has llenado de dudas de situaciones que atemorizan tu vida espiritual es porque no has dejado todo a las plantas de Cristo, tristemente podemos decir que aún no eres un hijo genuino de Cristo.

El hijo genuino a pesar de muchas prometer fidelidad, prometer constancia, prometer amor al prójimo, prometer permanencia en la unidad de los santos, es consciente de que puede fallar pero sin duda esta Cristo a través de su gracia sosteniéndonos y de esta manera nos arrepentimos y seguimos avanzando por el medio del espíritu santo que opera en nosotros. Gálatas capítulo 5 versículo 6 nos declara: Cristo nos libertó para que vivamos en libertad. Por lo tanto, manténganse firmes y no se sometan nuevamente al yugo de esclavitud. Escuchen bien: yo, Pablo, les digo que, si se hacen circuncidar, Cristo no les servirá de nada.  De nuevo declaro que todo el que se hace circuncidar está obligado a practicar toda la ley.  Aquellos de entre ustedes que tratan de ser justificados por la ley han roto con Cristo; han caído de la gracia Nosotros, en cambio, por obra del Espíritu y mediante la fe, aguardamos con ansias la justicia que es nuestra esperanza.

Seamos conscientes de nuestra realidad ante Dios, no podemos por nuestras fuerzas!! No podemos permanecer en esclavitud!! Libres somos del pecado y la maldad!! Somos nuevas Criaturas y eso lo declaran las escrituras. No más legalismo, abracemos la gracia de Cristo y seamos conscientes y suficientemente sinceros que por nuestras fuerzas no podemos!!

Descansa en Cristo, Descansa en sus Alas, descansa en su manto de amor, no te asustes, no temas, Dios está por ti. Descansa hermano, descansa y déjate llevar por su poder para preservación de nuestras Almas.
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Cristo es el que va con nosotros en el yugo. Así como el buey no va solo dando marcha adelante con el arado, surcando el camino, de esa manera va Cristo junto a nosotros  transportando nuestra alma al día de la redención, surcando el camino, avanzando con la pesada Carga que en él se hace ligera. 
Cristo cargo con nuestros pecados en la Cruz, el llevo la pesada carga, el pago el precio, él y solo él, merece la gloria.

Amén.

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